Cuaresma 2022
La Cuaresma es el tiempo litúrgico de conversión, que marca la Iglesia para prepararnos a la gran fiesta de la Pascua. El color litúrgico de este tiempo es el morado, que significa luto y penitencia. Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo.
La Cuaresma comienza el Miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo. Dura un total de 40 días, un número con amplios significados: los cuarenta días del diluvio, los cuarenta años de la marcha del pueblo judío por el desierto, los cuarenta días de Moisés y de Elías en la montaña y los cuarenta días que pasó Jesús en el desierto antes de comenzar su vida pública.
Cristo nos invita a cambiar de vida, por eso la Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas. Nos invita a vivir una serie de actitudes cristianas que nos ayudan a parecernos más a Jesucristo, ya que, por acción de nuestro pecado, nos alejamos más de Dios.
Durante este tiempo, debemos intensificar las "armas de la penitencia cristiana": la oración, el ayuno y la limosna.
La austeridad de los elementos con que se presenta en estos días el Templo se contrapone a la manera festiva con que se celebrará la Pascua y el tiempo pascual, por lo que este tiempo se suprimen las flores, la música instrumental, las campanillas, etc.
Por ello, la Cuaresma es el tiempo del perdón y de la reconciliación fraterna. Cada día, debemos apartar de nuestra vida para siempre, todo aquello que nos aleja de Dios y de los hermanos, debemos aprender a conocer y apreciar a Jesús, su vida y su Cruz; y con él, tomar nuestra cruz con la alegría de la superación.